Características del consumismo
Puede decirse que el consumismo es la actitud orientada a la adquisición continua de artículos, adquisición que no está siempre orientada a artículos particularmente necesarios para el comprador y que éste decide tener por razones distintas a la satisfacción de sus necesidades humanas.
El consumismo es una actitud mercantil del individuo, que forma parte de un entorno que siempre le afirma la importancia de tener los productos de última generación. En este sentido, el consumismo se apoya mucho en el mercado. Otras características del consumismo serán expuestas a continuación.

Estimulación del mercado y gusto desmedido por comprar
El mercado estimula la actitud consumista del individuo al proveerle de las oportunidades para gastar su dinero en la diversa gama de productos que tienen presencia en los establecimientos comerciales. Entre más amplia la oferta de artículos, hay mayores probabilidades de que la persona consiga lo que estaba buscando y use su capital.
Por otro lado, el individuo consumista tiene un gusto desmedido por comprar, desmedido en el sentido de que no es frecuente que reflexione profundamente sobre las consecuencias que tenga su estilo de vida en sus finanzas personas y familiares. Esto puede surgir a raíz de una concepción distorsionada de la riqueza, que la concibe e iguala a lo puramente material sin contemplar sus otras dimensiones.
Por su gusto particular afición a las compras, el individuo consumista necesita disponer continuamente de dinero rápido en orden de contar en todo momento con capital disponible para las compras. El individuo consumista necesita diversas fuentes de financiación para sostener sus hábitos. El problema está en que puede volverse algo adictivo.
Estimulación de las instituciones bancarias
El consumismo no favorece únicamente al mercado, sino también al sistema bancario, por lo que la financiación bancaria es un elemento clave en el consumismo. Gracias al préstamo de capital sobre el que se sustenta la financiación bancaria, la persona comunista puede disponer de un flujo continuo de capital prestado con el cual realizar las compras que le plazcan.
Como se dijo anteriormente, el dinero rápido es fundamental para que este hábito adquisitivo se mantenga, por lo que el individuo consumista busca opciones fáciles y rápidas de financiación. Una alternativa que cabe perfectamente en esta categoría son los préstamos personales que, tal como indica su nombre, están caracterizados por un rápido recibimiento por parte del prestatario.
El consumismo es una fuente de enriquecimiento para las instituciones bancarias porque alienta a las personas a solicitar continuamente financiación externa de manera de proveerle a su hábito adquisitivo sostenibilidad a corto, mediano y largo plazo.